La expresión «Abrir en Canal», muy común en las carnicerías, supone abrir el cuerpo de un animal de arriba a abajo, de la cabeza a las extremidades. Un concepto que nos queda como anillo al dedo y que además enlaza a otra acepción del término «Canal»
En este caso, el famoso Canal de Isabel II, la empresa pública que abastece de agua a la Comunidad de Madrid, y que está siendo objeto de investigación judicial a través de la famosa «Operación Lezo», por presuntos delitos de corrupción.
Una operación anticorrupción que resume a la perfección la lacra que ha venido creciendo y desarrollándose en los últimos años en España: un sistema corrupto en todas sus esferas: hay políticos, empresarios, directivos de medios de comunicación, responsables financieros, fiscales jefes y responsables policiales.
Una lacra que amenaza con destrozar esta sociedad, y cuya ambición desmedida, me temo, solo puede ser frenada «abriendo en Canal». De arriba a abajo.